viernes, 5 de febrero de 2010
fRagmentoS de la ReGenta! de lOrena
tablillas oblicuas, y a través de aquellos agujeros pedir el perdón de Dios
y el del hermano del alma, y si el perdón no era posible, pedir la peniten-
cia sin el perdón, pedir a fe perdida o adormecida o quebrantada, no sa-
bía qué, pedir la fe aunque fuera con el terror del infierno... Quería llorar
allí, donde había llorado tantas veces, unas con amargura, otras sonrien-
do de placer entre las lágrimas; quería encontrar al Magistral de aquellos
días en que ella le juzgaba emisario de Dios, quería fe, quería caridad... y
después el castigo de sus pecados, si más castigo merecía que aquella
obscuridad y aquel sopor del alma...
fRagmentoS de la ReGenta! De paula
anchos balcones abiertos de par en par; estaba convidado también, así
como el vientecillo indiscreto que movía los flecos de los guardamalletas
de raso, los cristales prismáticos de las arañas, y las hojas de los libros y
periódicos esparcidos por el centro de la sala y las consolas. Si entraban
raudales de luz y aire fresco, salían corrientes de alegría, carcajadas que
iban a perder sus resonancias por las calles solitarias de la Encimada, rui-
do de faldas, de enaguas almidonadas, de manteos crujientes, de sillas
traídas y llevadas, de abanicos que aletean...
fRagmentoS de la ReGenta! de kOral rubiia
empujaba las nubes blanquecinas que se rasgaban al correr hacia el Nor-
te. En las calles no había más ruido que el rumor estridente de los remoli-
nos de polvo, trapos, pajas y papeles que iban de arroyo en arroyo, de
acera en acera, de esquina en esquina revolando y persiguiéndose, como
mariposas que se buscan y huyen y que el aire envuelve en sus pliegues
invisibles. Cual turbas de pilluelos, aquellas migajas de la basura, aque-
llas sobras de todo se juntaban en un montón, parábanse como dormidas
un momento y brincaban de nuevo sobresaltadas, dispersándose, trepan-
do unas por las paredes hasta los cristales temblorosos de los faroles,
otras hasta los carteles de papel mal pegado a las esquinas, y había plu-
ma que llegaba a un tercer piso, y arenilla que se incrustaba para días, o
para años, en la vidriera de un escaparate, agarrada a un plomo.
RUTAS LITERARIAS
Este programa, que vio la luz por primera vez hace ya cinco años, responde a una iniciativa del Ministerio de Educación, Política Social y Deporte en colaboración con las comunidades autónomas para promover programas de cooperación territorial que estén orientados a objetivos educativos de interés general. En este contexto, "Rutas Literarias" se diseñó como un recurso educativo para alumnos de tercero y cuarto de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) que les ayudara a completar la formación que reciben en el aula mediante la realización de una ruta literaria por alguna de las autonomías de nuestro país. Con esta iniciativa se pretende cumplir un doble objetivo: por una parte, fomentar el hábito de la lectura y, por otra, favorecer el conocimiento y aprecio de las riquezas culturales de España mediante la visita a pueblos y ciudades de otras comunidades.
Por otra parte, y de forma paralela, cada año se convoca un programa de ayudas económicas que hagan posible que todos los alumnos puedan afrontar los gastos que se deriven del viaje. Estas ayudas sufragan tanto los gastos de alojamiento y manutención de los estudiantes como el desarrollo de las actividades; también, y según la distancia que separa el centro educativo al que pertenecen los alumnos del lugar donde se realiza la ruta, se proporciona una ayuda para desplazamiento.
El programa "Rutas Literarias" está destinado a grupos de entre 20 y 24 alumnos que cursen 3º y 4º de la ESO en centros españoles ordinarios, acompañados de dos profesores que habitualmente les impartan clases y que se responsabilizarán de la adecuada participación del grupo en la actividad. Cada año, a finales de septiembre el Ministerio de Educación publica en el Boletín Oficial del Estado el programa "Rutas Literarias" junto a la convocatoria de ayudas que asigna a cada comunidad autónoma el número de grupos que pueden participar en función del número de grupos que asimismo ellas acogen, y las rutas a las que pueden acceder. Actualmente, integran el programa 118 grupos, es decir, más de 2.500 alumnos. Destaca la participación de Andalucía y Castilla León, con 23 y 20 grupos respectivamente.
RUTAS
Aunque en su primera convocatoria el programa contaba con tan sólo 14 rutas, actualmente son ya 20 el número de itinerarios literarios, uno en cada comunidad autónoma, exceptuando Andalucía, Castilla León y Castilla la Mancha que ofrecen dos rutas alternativas.
Andalucía: Poetas del 27 y Vida y obra de Juan Ramón Jiménez.
Aragón: La ruta del Cid por el Aragón fronterizo.
Asturias: Caminos de Leopoldo por Asturias: Regenta, ingenio y narrativa.
Islas Baleares: El Arquitecto y el Templario. Dos historias paralelas en la Mallorca medieval y en la contemporánea.
Canarias: Unamuno y el paisaje canario.
Cantabria: Tras los pasos de Pereda. Cantabria interior y Cantabria costera.
Castilla la Mancha: Por tierras y letras de Cuenca, y El Quijote.
Castilla y León: De Romances y leyendas por Zamora, y Antonio Machado y Soria.
Cataluña: La literatura modernista en Cataluña.
Extremadura: Itinerario literario por Extremadura.
Galicia: El romanticismo en Galicia a través de la figura de Rosalía de Castro.
La Rioja: El origen de la lengua castellana y los monasterios riojanos.
Madrid: Alcalá de Henares y Madrid: vida y obra de Cervantes.
Murcia: El 98 y el 27 en la región de Murcia.
Navarra: Dos leyendas del camino a historia de ciudades.
País Vasco: Ruta literaria por tierras vascas.
Valencia: Un paseo por el paisaje de Blasco Ibáñez.
Análisis de La Regenta
Algunas novelas, cuentos y ensayos de Clarín
- Solos de Clarín (1881)
- La literatura en 1881 (1882)
- Sermón perdido (1885)
- Ensayos y revistas (1892)
- Palique (1894)
NOVELAS
- La Regenta (1884–1885)
- Su único hijo (1890)
CUENTOS
- Dos sabios
- El dúo de la tos
- El gallo de Sócrates
- En el tren
- En la droguería
- Un voto
- Adiós, Cordera
- Boroña
Leopoldo Alas Clarín- (España, 1852-1901)
Argumento de La Regenta
La regenta trata sobre una bella y joven muchacha llamada Ana Ozores que se casa con Don Víctor Quintana, que era el ex-regente de Vetusta( que en verdad es Oviedo) y que es un personaje mucho mas mayor que ella, es egoísta, es un romántico retrasado, un idealista ingenuo, un hombre que de un modo o de otro vive en un mundo irreal en el que todo es una comedia. Al principio Víctor no quiere saber nada del drama que vive su esposa pero des pues se solidariza con ella.
Ana se siente agobiada en ese mundo y debido a su frustración se convierte en presa del donjuán de Vetusta don Álvaro que es el símbolo de la vida vetustense, tiene sabiduría, es caballero.
También se ve presa de su propio confesor don Fermín de Pas. Ana necesita amor y Fermín anhela serlo todo para ella, tiene que reconocer que lo que siente por Ana es amor, que la quiere como esposa.
Se rebela contra la sotana, pero no se rebela con su madre, que le controla en todo momento, es un cobarde.
Se limita a vivir dolorosamente, desgarradamente su impotencia.
El le hace daño a Ana y a todos. No puede librarse de las cadenas de su cárcel.
Él busca la venganza, traiciona a Ana.
Entonces se inicia una guerra entre Álvaro y Fermín por conseguir el amor de Ana, y con esta lucha empieza una lucha entre los dos poderes de la ciudad: la iglesia mas retrograda y el caciquismo teñido de liberalismo. Entonces cuando víctor despierta de su sueño irreal acaba en un duelo contra don Álvaro, entonces este mata al ex-regente, entonces Álvaro se da cuenta de lo que ha hecho y huye de manera cobarde dejando clara su ruindad.
Esto lo aprovecha Fermín para conseguir a Ana, pero ya estaba hundido y con una falta de escrúpulos y moral se hace con la regenta.
Ana necesita amor y Fermín anhela serlo todo para ella, ve que su deseo cada vez crece más y tiene que reconocer que lo que siente por Ana es amor, que la quiere como esposa.
Se rebela contra la sotana, pero no se rebela con su madre, es un cobarde.
Se limita a vivir dolorosamente, desgarradamente su impotencia.
El ahora le hará daño a Ana, a Mesía y a todos. No puede librarse de las cadenas de su cárcel, Fermín nunca ha sentido a Dios, es más ateo que don Álvaro.
Él busca la venganza, traiciona a Ana.